La familia léxica de la palabra “ojo” está compuesta por una variedad de términos relacionados con este órgano sensorial tan importante. A continuación, te mostramos una lista de palabras que forman parte de esta familia léxica:
– Anteojera: se trata de una pieza que se coloca alrededor de la cabeza de un caballo para evitar que mire hacia los lados o atrás.
– Óculo: término utilizado en medicina para referirse a un instrumento que se utiliza para examinar el ojo.
– Ojera: se refiere a la zona oscura y hundida que se forma debajo del ojo debido a la falta de sueño o a otros factores.
– Monocular: adjetivo que describe algo relacionado con un solo ojo o con la visión de un solo ojo.
– Ojeada: acción de mirar rápidamente o de forma fugaz.
– Ojito: forma cariñosa de referirse al ojo.
– Monóculo: tipo de lente o cristal utilizado para corregir problemas de visión en un solo ojo.
– Ojeador: persona encargada de observar y buscar algo específico.
– Ojos: palabra que se utiliza para referirse a los órganos visuales humanos.
– Ocular: adjetivo que se utiliza para describir algo relacionado con el ojo.
– Oculista: especialista médico encargado del cuidado y tratamiento de los ojos.
– Ojear: verbo que se utiliza para describir la acción de mirar fijamente o de forma detallada.
– Ojoso: adjetivo que se utiliza para describir a alguien con los ojos grandes o prominentes.
– Ojeo: acción de observar detenidamente o de buscar algo con atención.
– Reojo: forma de mirar de reojo o de soslayo.
Como puedes ver, la familia léxica de la palabra “ojo” es bastante amplia y abarca diferentes aspectos relacionados con este órgano tan importante para la visión.
¿Qué es una familia léxica? ¿Cuáles son 4 ejemplos?
Una familia léxica es un conjunto de palabras que comparten una misma raíz o lexema. Estas palabras pueden tener diferentes formas gramaticales, como verbos, sustantivos, adjetivos, adverbios, etc., pero todas se derivan de la misma raíz. Las familias léxicas nos permiten identificar y relacionar palabras con significados similares o relacionados entre sí.
Por ejemplo, la palabra primitiva “silla” forma parte de una familia léxica que incluye palabras derivadas como “ensillar”, “sillero”, “sillería”, “silleta”, “sillita”, “sillón”, entre otras. Todas estas palabras comparten la raíz “sill-” y están relacionadas con el concepto de “silla”.
Otro ejemplo de familia léxica es la palabra primitiva “barco”, que genera palabras derivadas como “barquito”, “barcaza”, “embarcar”, “embarcación”, “barcos”, “embarcadero”, entre otras. Todas estas palabras tienen en común el lexema “barc-” y están relacionadas con el concepto de “barco”.
¿Cómo se clasifica la familia léxica?
La familia léxica se clasifica en palabras primitivas y palabras derivadas. Las palabras primitivas son aquellas que no se forman a partir de otra palabra, sino que son independientes y constituyen la base de la familia léxica. Por ejemplo, la palabra “casa” es una palabra primitiva, ya que no se forma a partir de ninguna otra palabra. Las palabras derivadas, por otro lado, son aquellas que se forman a partir de una palabra primitiva añadiendo un afijo, como un prefijo o un sufijo. Estos afijos modifican el significado de la palabra original y crean nuevas palabras. Por ejemplo, a partir de la palabra “casa” se pueden formar palabras derivadas como “casita” o “casero”.
La clasificación de la familia léxica en palabras primitivas y derivadas es importante para entender la relación entre las palabras y su formación. Las palabras derivadas tienen una relación semántica y morfológica con la palabra primitiva de la cual se derivan. Además, esta clasificación nos permite analizar la estructura interna de las palabras y estudiar cómo diferentes afijos pueden afectar su significado. En resumen, la clasificación de la familia léxica en palabras primitivas y derivadas nos ayuda a comprender la riqueza y diversidad del vocabulario de un idioma.
¿Qué es una familia léxica? ¿Cuáles son algunos ejemplos para niños de primaria?
Una familia léxica está compuesta por un conjunto de palabras que tienen la misma raíz y están relacionadas en su significado. Estas palabras comparten un origen común y pueden variar en su forma o flexión, pero mantienen una conexión semántica. Por ejemplo, la palabra “fruta” es la raíz de la familia léxica que incluye palabras como “fruto”, “frutería” o “frutero”. Todas estas palabras están relacionadas con el concepto de fruta, pero tienen diferentes formas y funciones en el lenguaje.
Para que los niños de primaria comprendan mejor el concepto de familia léxica, se pueden utilizar ejemplos más cercanos a su vida cotidiana. Por ejemplo, a partir de la palabra “casa” se pueden formar palabras como “casita”, “casero” o “caserío”. De la palabra “libro” se pueden derivar palabras como “librería”, “librero” o “librito”. Otro ejemplo podría ser la palabra “escuela”, que puede dar origen a palabras como “escolar”, “escolarización” o “escolarizar”. Estos ejemplos permiten a los niños identificar cómo las palabras están relacionadas entre sí y cómo se pueden formar nuevas palabras a partir de una raíz común.
¿Cuál es la familia léxica de mano?
La familia léxica de la palabra “mano” incluye una serie de términos que están relacionados semánticamente con este concepto. Algunos ejemplos de palabras que forman parte de esta familia son: contramano, manipular, manotada, maniabierto, manito, manotazo, maniatar, manivela, manual, manicura, manojo, manualidad, manija, manopla y manubrio.
La palabra “mano” se utiliza para referirse al órgano que se encuentra en el extremo de los brazos y que está formado por los dedos y la palma. Sin embargo, en el lenguaje coloquial y figurado, también se utiliza para referirse a diversas acciones y objetos relacionados con este órgano. Por ejemplo, la expresión “manipular” se refiere a la acción de usar las manos para manejar o controlar algo. Del mismo modo, “manotada” se utiliza para referirse a un golpe dado con la mano abierta.
¿Cómo puedo saber a qué familia pertenece una palabra?
Para saber a qué familia pertenece una palabra, es necesario conocer la raíz de la misma. Las familias de palabras están formadas por un conjunto de palabras que comparten la misma raíz y tienen un significado relacionado. Estas palabras derivan de una palabra primitiva y se forman a través de diferentes procesos morfológicos, como la derivación, la composición o la parasíntesis.
Por ejemplo, si tomamos la palabra “fruta” como palabra primitiva, podemos identificar diferentes palabras que forman parte de su familia, como “frutal”, “frutero”, “frutería” o “frutalmente”. Todas estas palabras tienen en común la raíz “frut-“, que es lo que las une en la misma familia. Además, su significado está relacionado con la idea de fruta, ya sea como adjetivo (frutal), como profesión o lugar (frutero, frutería) o como adverbio (frutalmente).