La palabra “mano” pertenece a una familia léxica que incluye una variedad de términos relacionados con esta parte del cuerpo humano. Estos términos pueden tener diferentes significados y aplicaciones en distintos contextos. Aquí te presentamos algunos ejemplos de palabras con la raíz “mano”:
- Contramano:
- Manipular: Significa manejar o utilizar algo con habilidad, generalmente con la intención de influir o controlar una situación. Por ejemplo, un manipulador puede ser alguien que intenta influir en los demás para obtener beneficios propios.
- Manotada: Hace referencia a un golpe o movimiento brusco realizado con la mano. Por ejemplo, si das una manotada sobre la mesa, estás expresando enfado o frustración.
- Manicura: Es un tratamiento estético que se realiza en las manos, principalmente en las uñas. Consiste en limar, cortar, pulir y embellecer las uñas, tanto de las manos como de los pies.
- Manojo: Se refiere a un conjunto de cosas o elementos que se agrupan y se sujetan con la mano. Por ejemplo, un manojo de llaves es un conjunto de llaves que se sostienen juntas.
- Manualidad: Es una actividad creativa que se realiza con las manos. Incluye actividades como la pintura, el modelado, la costura, entre otras.
- Manija: Es el mango o asa que se utiliza para abrir o cerrar una puerta, cajón o cualquier otro objeto que requiera ser manipulado.
- Manopla: Es un guante grueso y acolchado que se utiliza para proteger las manos del frío o para realizar ciertas tareas que requieren un mayor agarre.
- Manubrio: Es el mango o manija que se encuentra en el extremo de un volante, manillar o guidón, utilizado para controlar la dirección de una bicicleta, motocicleta u otro vehículo similar.
- Manilargo: Se refiere a una persona que tiene las manos largas o dedos largos. También puede hacer referencia a algo que se extiende o se alarga mucho en dirección horizontal.
- Manos: Hace referencia a las extremidades superiores del cuerpo humano, compuestas por la palma de la mano, los dedos y la muñeca. Las manos son fundamentales para realizar una gran variedad de actividades y tareas cotidianas.
- Manuscrito: Se refiere a un texto o documento escrito a mano, antes de la invención de la imprenta. Los manuscritos pueden ser antiguos o contemporáneos, y pueden contener información relevante en diversos campos del conocimiento.
- Manilla: Es un pequeño objeto o dispositivo que se utiliza para abrir o cerrar una puerta, ventana o cualquier otro tipo de abertura. Generalmente, las manillas se accionan con la mano.
- Manosear: Significa tocar o manipular algo con las manos de manera insistente o brusca, generalmente con una intención curiosa o abusiva. Por ejemplo, si alguien manosea tus pertenencias, está tocándolas o manipulándolas sin tu permiso o de manera indebida.
- Pasamano: Hace referencia a una barandilla o pasamanos que se coloca en escaleras, balcones u otras estructuras para brindar apoyo y seguridad al caminar.
Se refiere a la dirección opuesta a la establecida o recomendada en una vía de tráfico. Por ejemplo, si conduces en contramano, estás yendo en sentido contrario al flujo de vehículos.
Estas son solo algunas de las palabras que forman parte de la familia léxica de “mano”. Cada una de ellas tiene su propio significado y aplicaciones, y en conjunto, enriquecen nuestro vocabulario y nos permiten expresarnos de manera más precisa.
¿Cuál es el sufijo de mano?
El sufijo de la palabra “mano” es “-́mano” en singular y “-́manos” en plural en masculino, mientras que en femenino es “-́mana” en singular y “-́manas” en plural.
Los sufijos son morfemas que se añaden al final de una palabra para formar nuevas palabras o para modificar su significado. En el caso de “mano”, el sufijo “-́mano” indica la pertenencia o relación con la palabra base. Por ejemplo, podemos formar la palabra “manitas” al añadir el sufijo “-́itas”, que indica diminutivo, o la palabra “manazas” al añadir el sufijo “-́azas”, que indica un aumento o exageración del significado.
Es importante destacar que los sufijos también pueden interactuar con otros morfemas, como los prefijos o los flexivos, para formar palabras más complejas. Por ejemplo, si añadimos el sufijo “-́eta” al final de la palabra “carro”, obtenemos la palabra “carreta”. Además, los sufijos también pueden ser utilizados para formar el plural de una palabra. Por ejemplo, si añadimos el sufijo “-́os” al final de la palabra “carro”, obtenemos la forma plural “carros”.
¿Cuál es la familia de la lluvia?
La familia léxica de la palabra “lluvia” se refiere a todas las palabras que están relacionadas semánticamente con ella. Estas palabras comparten la misma raíz y tienen un significado similar o relacionado. Algunas de las palabras que forman parte de la familia léxica de “lluvia” son: llovedera, llovida, lloviznoso, llovediza, llovizna, lluvias, llovedizo, lloviznar, lluviosa y lluvioso.
La palabra “lluvia” es el sustantivo que describe la precipitación de agua en forma de gotas que caen de las nubes. A partir de esta raíz, se pueden formar diferentes derivados y palabras relacionadas que amplían el significado y la variedad de términos relacionados con la lluvia. Por ejemplo, “llovedera” se refiere a una lluvia abundante, “llovida” describe algo que ha sido mojado por la lluvia, “lloviznoso” se utiliza para describir algo que está relacionado con una llovizna, y así sucesivamente.
¿Cuál es el lexema de la palabra escuela?
En este caso, el lexema o raíz de la palabra “escuela” es “escuel-” o “escol-“, dependiendo de cómo siga el término. El lexema es la parte de la palabra que no cambia y que contiene el significado principal. A partir de este lexema, se pueden formar palabras derivadas mediante la adición de morfemas, como sufijos o prefijos.
Por ejemplo, al añadir el sufijo “-ar” a “escuela”, se obtiene la palabra “escolar”, que se refiere a todo lo relacionado con la escuela. Además, si se agrega el prefijo “extra-” al lexema “escuel-“, seguido del sufijo “-ar”, se forma la palabra “extraescolar”, que se refiere a todas aquellas actividades que se realizan fuera del horario escolar.
¿Cuál es la familia de la mano?
La familia léxica de la palabra “mano” está compuesta por palabras que comparten el mismo lexema o raíz, es decir, que están relacionadas semánticamente con la palabra “mano”. Algunos ejemplos de palabras que pertenecen a esta familia son: “manotazo”, “manopla”, “manipular” y “manualidad”.
En primer lugar, tenemos el término “manotazo”, que se refiere a un golpe dado con la mano abierta. Esta palabra deriva de “mano” y añade el sufijo “-tazo” para indicar que se trata de un golpe fuerte. Por otro lado, está el vocablo “manopla”, que hace referencia a una prenda que se usa para proteger las manos del frío. Aquí, el sufijo “-pla” se añade al lexema “mano” para indicar que se trata de una especie de guante.
Otro término que encontramos es “manipular”, que significa manejar o controlar habilidosamente algo o a alguien. En este caso, el lexema “mano” se combina con el sufijo “-pular” para formar el verbo “manipular”. Por último, tenemos la palabra “manualidad”, que se refiere a una actividad o trabajo realizado con las manos. En este caso, el sufijo “-idad” se agrega al lexema “mano” para formar el sustantivo “manualidad”.
¿Cuál es la palabra compuesta que se forma con la palabra mano?
La palabra compuesta que se forma con la palabra “mano” es “contramano”. La palabra “contramano” está compuesta por el prefijo “contra-” que indica oposición o contradicción, y la palabra “mano” que se refiere a la extremidad del cuerpo humano que se utiliza para agarrar, sujetar y manipular objetos.
“Contramano” se utiliza para describir la acción de circular en dirección opuesta a la establecida o recomendada. Por ejemplo, cuando alguien conduce en sentido contrario al flujo normal del tráfico se dice que va en “contramano”. Esta palabra compuesta es muy utilizada en el ámbito de la circulación vial y es importante conocerla para entender las indicaciones y señales de tránsito.