La trombosis venosa profunda (TVP) es una afección médica en la que se forma un coágulo de sangre conocido como trombo en las venas profundas, lo que ralentiza el flujo de sangre a través de las venas. En algunos casos, el coágulo puede obstruir el flujo de sangre por completo y causar dolor grave y otros problemas de salud. En su mayoría, la trombosis venosa profunda es común en las áreas de la parte inferior de las piernas, la pelvis o la región del muslo, pero también puede ocurrir en otras partes del cuerpo como el brazo, el hígado, el cerebro o el riñón.
Aunque la trombosis venosa profunda se considera una afección médica curable, puede poner en riesgo la vida si el coágulo de sangre se desprende de su posición y viaja a los pulmones y causa obstrucción en los pulmones. Esto puede resultar en una condición de salud grave conocida como embolia pulmonar que puede ser muy peligrosa para la vida. Por lo tanto, los médicos normalmente recomiendan evitar los ejercicios o la movilidad intensa después del diagnóstico de trombosis venosa profunda.
Pero en los últimos años de investigación médica, se descubrió que hacer ejercicios físicos leves puede no ser riesgoso y, de hecho, puede ser beneficioso a menos que tenga otras condiciones de salud asociadas. Este artículo resume el impacto del ejercicio físico en el tratamiento de la TVP y detalla las mejores pautas de ejercicios.
Impacto del ejercicio en la TVP
Estudios recientes en el campo de la medicina han establecido la importancia del ejercicio en el tratamiento de la TVP. Algunos de los beneficios clave de hacer ejercicio en condiciones de TVP son los siguientes:
- Es beneficioso para ayudar a la circulación y puede aliviar la insuficiencia venosa, una afección en la que la sangre no fluye correctamente de regreso al corazón. En tal situación, actividades como caminar pueden ayudar a mejorar la situación.
- Los ejercicios físicos como caminar y estiramientos leves pueden ayudar a reducir las molestias causadas por la TVP, reducir el enrojecimiento y disminuir la hinchazón en el área afectada.
- En numerosos estudios médicos se encontró que los pacientes que comenzaron a caminar bajo la supervisión de un médico después de ser diagnosticados con TVP tenían un riesgo menor de desarrollar embolia pulmonar que aquellos pacientes que permanecieron en la cama.
- Dichos pacientes informaron una mejor circulación y, por lo tanto, agregaron menos posibilidades de síntomas persistentes en las pantorrillas.
Cuándo evitar el ejercicio en la TVP
En la TVP existe un alto riesgo de que el coágulo de sangre se desprenda de su lugar y viaje a los pulmones causando una embolia pulmonar. Es por esta razón que el ejercicio físico con TVP no es adecuado para todos. Aunque se ha encontrado que los ejercicios físicos en la TVP son útiles, no son adecuados para todos los pacientes con TVP. De ahora en adelante se recomienda que los ejercicios físicos se realicen sólo después de la aprobación del médico y bajo la supervisión de un médico. Aquellos pacientes que no pueden tomar medicamentos anticoagulantes o que tienen otras afecciones médicas subyacentes corren un alto riesgo de desarrollar una embolia pulmonar y, por lo tanto, los médicos les recomiendan reposo absoluto en cama. Dichos pacientes deben evitar hacer ejercicios por completo cuando se les diagnostica TVP.
Algunos ejercicios para TVP
A las personas con síntomas leves de TVP se les puede pedir que realicen pequeñas actividades físicas. Antes de realizar cualquier ejercicio físico, es necesario consultar al médico y buscar el mejor ejercicio que pueda evitar mayores riesgos. Comenzar los ejercicios lentamente es la mejor estrategia en la TVP.
Caminando:
Caminar se considera un ejercicio físico altamente seguro en condiciones de TVP. Caminar ayuda a mejorar la circulación sanguínea, mejora los síntomas de la TVP aguda y también ayuda a eliminar el dolor. En algunos casos, caminar puede ayudar a disolver los coágulos. Además, se ha descubierto que cuando se combina la marcha con la terapia de compresión, el resultado es mucho mejor.
Considere trabajar durante 5 minutos al principio, agregue el ritmo cómodo al menos 3 veces al día. Para la próxima semana, aumente lentamente la duración del tiempo durante 5 minutos más. Cuando se sienta cómodo y saludable, trabajar de 30 a 40 minutos una vez al día lo ayudará a sanar.
Para aquellos que se sientan por más horas:
Las personas que tienen que permanecer sentadas durante más horas cuando se les diagnostica TVP tienen mayores probabilidades de sufrir dolor intenso. Es necesario que eviten estar sentados más de 2 horas. Dichos pacientes pueden realizar ciertos ejercicios de estiramiento o extensión como los siguientes:
- Bombas de tobillo: en este ejercicio coloca los talones en el suelo y mueve lentamente los dedos de los pies hacia la espinilla. Repita lo mismo con el otro pie.
- Extensión de pierna: en este ejercicio coloque sus muslos en un asiento cómodo y lentamente deje que la parte inferior de su pierna quede paralela al suelo. Después de unos segundos, vuelva a colocar lentamente la pierna en su posición. Repita el procedimiento con la otra pierna.
- Método de marcha sentado: en este método, tire lentamente de la rodilla hacia el pecho y luego, después de unos segundos, mueva la pierna hacia el piso. Repita el procedimiento con otra pierna.
Asegúrese de realizar estos ejercicios anteriores en un conjunto de 30 repeticiones.
Recuerde que hacer ejercicios puede provocar la pérdida de líquidos debido a la sudoración y esto puede provocar deshidratación, lo que a su vez puede disminuir la presión arterial. Por lo tanto, es necesario mantenerse hidratado.
¿Cuándo llamar al médico?
Llame al médico de inmediato y deje de hacer ejercicios si nota alguno de los siguientes síntomas:
- Sensación de dificultad para respirar y dolor torácico asociado
- Sentir mareos o tener confusión.
- Acumulación de dolor e hinchazón en las regiones de las piernas o el área afectada.
- Dolor insoportable o sensación de calor en la región afectada
- Tosiendo sangre
Conclusión
Los ejercicios físicos han demostrado ser útiles para los pacientes de inserción y TVP. Algunos médicos están preocupados por el desalojo del coágulo de sangre y el riesgo de embolia pulmonar y, por lo tanto, pueden pedirle que evite cualquier actividad física durante el tratamiento de la TVP. Mientras que algunos profesionales de la salud pueden pedirle que se someta a ejercicios físicos moderados para improvisar su estado de salud. Por lo tanto, consulte a su médico antes de hacer cualquier cosa.